Ciudad Nuestra – Aclaración: A los amigos de CARETAS.

He leído con sorpresa una leyenda colocada debajo de una foto mía en el marco de una nota titulada CUESTION DE FECHAS en la página 19 de la edición de CARETAS del jueves 11 de febrero. He sostenido en público y sostengo ahora que el camino adecuado para aclarar los cuestionamientos vinculados a la cancelación de una deuda de la MML a la empresa RELIMA, con quien mantiene una relación contractual de larga data, está más fuera que dentro de la Municipalidad. Que una empresa privada provisione una deuda y la castigue para luego venderla al 40% de su valor es un acto legítimo pero extraño. Y es extraño porque se trataba de una acreencia garantizada cuyo titular era la Municipalidad con quien Relima, en ese entonces, acababa de renovar el contrato por 10 años más (del 2005 al 2015). Y esta operación ocurrió en el escenario en el que las negociaciones para cancelar dicha deuda ya habrían concluido con un acuerdo de montos nominales y modalidad de pago. De modo que apurar una transacción y perjudicar la caja de la empresa es un asunto que despierta legítima sospecha por tratarse de una cantidad de dinero considerable. Sostuve en la sesión del Concejo Metropolitano del 4 de febrero pasado, que la MML debía solicitar formalmente y, de ser posible, por acuerdo unánime, a los organismos del Estado que corresponden (SBS, SUNAT y otros), que proporcionen la información que corrobore o no si las personas jurídicas involucradas y sus representantes cumplieron con todas sus obligaciones legales, tributarias y otras. Una pesquisa de auditoría que muestre las razones de la repentina solvencia de una empresa (Comunicore) sin mayor actividad y otra pesquisa que explique cómo una corporación como RELIMA, en lugar de acudir al mercado financiero para conseguir dinero a través del factoring, “encuentra” a Comunicore con una sobre liquidez espectacular.

Estas y otras son las preguntas que deben ser respondidas por los privados. Y quizá en sus respuestas encontremos algún vínculo con la estructura municipal. O quizás no. De allí que afirmar que yo “habría pedido investigar vínculos de Comunicore y parientes de Luis Castañeda” tal como se coloca en la leyenda, es estirar mi reflexión más allá de lo que, por el momento, corresponde hacer y en efecto realicé el jueves pasado.

Febrero 11 de 2010

Rafael García Melgar Director Ejecutivo

Ciudad Nuestra